Este combo de TRIÁNGULO+RAMPA, inspirado en las ideas de Emmi Pikler y el Movimiento Libre, es un instrumento muy eficaz para el desarrollo motor de niños y niñas. Impulsa el movimiento y la exploración libre: suben y bajan, pasan por debajo, fortalecen sus músculos, afrontan retos físicos y juegan a infinidad de cosas.
La clásica actividad de escalada es elemental en el desarrollo de la confianza, la fuerza y las habilidades motoras gruesas de cada niño.
El triángulo es ideal desde que gatean, porque van explorando y lo utlizan de ayudar para pararse luego.
La rampa reversible es un accesorio indispensable para sacar más partido al mobiliario. Tiene dos caras, una lisa que imita un tobogán y otra con peldaños por los cuales trepar.